

El tiempo promedio se calcula quitando la primera vuelta. Fuente: elaboración propia
En Sachsenring han conseguido más puntos quienes más lo necesitaban. Marc Márquez, imbatible aquí desde 2010 en todas las cilindradas en las que ha corrido, no sólo ha ganado la carrera, sino que se sitúa líder de la clasificación general antes del parón veraniego que marca el ecuador del Campeonato.

Márquez también gana en pistas con grip. Foto: MotoGP
Salvo la vuelta rápida (Jonas Folger, 1´21.442), Marc Márquez hizo una carrera perfecta. Salió bien, marcó el ritmo y no se arredró ante Jonas Folger en su día. Supo dar ese puntito extra a final de carrera para desfondar a su adversario. Con gomas usadas Márquez es mejor que los demás, pues su estilo no es de tiralíneas precisamente, y donde los demás se achantan él saluda al límite con desparpajo. Hasta que se encebolla. Pero hoy no era un día de esos: “Ha sido una carrera muy rápida. He empezado muy fuerte, y cuando me ha pasado Folger he pensado que con neumático nuevo iba muy bien, pero no he parado de empujar y él seguía ahí, aún haciendo 1´21´s en todas las vueltas. Al final he pegado otro pequeño apretón y he conseguido descolgarle. No me creo el poder irme de vacaciones como líder, estoy muy contento”.

Clas. General, diferencia al anterior, al líder y número de “ceros”. Elaboración propia.
La diferencia entre los cuatro primeros es ahora de 10 puntos, todavía menos que antes, y Dani Pedrosa, tercer clasificado en Alemania y quinto en la general, ya se sitúa a casi una carrera del líder -26 puntos- y sólo a 16 puntos del cuarto clasificado en la tabla, Valentino Rossi.

Primeros compases de la carrera. Foto: MotoGP
También ha sido la carrera en la que los equipos satélite -salvo Honda- han rascado unos puntos que podrían ser preciosos a final de temporada para sus pares oficiales. Jonas Folger (2º) ha hecho en casa la mejor carrera de la temporada. Durante el fin de semana se ha mostrado veloz, con ritmo, y lo que es más importante, ha sabido administrar los neumáticos en una carrera en la que Marc Márquez ha impuesto un ritmo muy alto. Pero eso no significa que los pilotos del Movistar Yamaha hayan hecho una mala carrera, todo lo contrario. Tanto Maverick Viñales (4º) como Valentino Rossi (5º) salían de posiciones muy retrasadas (11º y 9º respec.) y quedaron en las mejores posiciones que su ritmo les permitía. Es lo que se espera de Valentino Rossi, gallina vieja, la estrategia que funciona, y que le permite luchar por el título aún en su noviembre deportivo. Pero tras el traspié de Maverick en Assen, yendo a por todas cuando todas se habían ido, el sábado rondaba la pregunta en el paddock de qué iba a hacer hoy saliendo desde 4ª línea de parrilla. La respuesta la traía Viñales en la línea de meta tras remontar pacientemente merced a su ritmo en una pista pequeña y que tiene los puntos que tiene para adelantar en MotoGP. Lo que tenía que haber hecho en Assen lo ha hecho hoy, demostrando su temple la primera vez que ha sido cuestionado. Alegría en la cara del italiano y callada satisfacción en la de Mack.

Tras un cero, Bautista se resarce por delante de Lorenzo. Foto: MotoGP
Álvaro Bautista también hizo una gran carrera, en su caso viniendo desde atrás -salió 12º, y la primera vuelta fue horrible- , y puede que Dovizioso (8º) necesite los puntos que le birlaron el de Aspar y Aleix Espargaró en las últimas vueltas. Ha sido la peor carrera que ha terminado Dovi este año, justo en su primera defensa del (efímero) liderato.

Pequeño subidón en el box de Pedrosa. Foto: MotoGP
Más que de peleas, ha sido una carrera de ritmo, en la que los adelantamientos no han sido correspondidos con lucha, iban todos con el pincho. El perfecto reasfaltado del circuito, ya sin baches, ha conseguido que Michelin no haya sido esta vez protagonista. Ya desde el principio se escaparon Márquez, Pedrosa y Folger, que tenían mejor ritmo y despacharon los neumáticos blandos de Lorenzo en un santiamén. Tras el primer tercio de carrera la cosa quedó entre Márquez y Folger, pues Pedrosa se descolgó hasta llegar a meta en solitario: “Tuvimos una buena oportunidad, salimos bien y tenía buen feeling, pero a partir de la 2ª vuelta comencé a sufrir mucho spinning. Cuando me pasó Folger intenté seguirles, pero el spinning iba a más. Estoy contento con el podio porque es bueno para el campeonato”. Y tanto que lo es. Es la diferencia entre estar en la terna de candidatos al título a ser el primero de “el resto”. Y que ningún satélite se te suba a las barbas, oye.

Las mieles del podio llevan burbujas. Foto: MotoGP
Folger aún no había aterrizado en el parque cerrado: ” No sé qué decir, no me lo esperaba. Me sentía fuerte, y podía seguir a Marc, al principio no me lo creía. Traté de guardar neumáticos tras Marc, pero he cometido un gran error en la 1. Seguía teniendo un gran ritmo, pero a dos vueltas del final la rueda trasera ha dicho basta”. A pesar del espectacular comienzo de su compañero y también rookie Johann Zarco, se sitúa inmediatamente detrás de él en la general (7º), por encima de motos pata negra como la de Lorenzo o Petrucci.

Una veraniega ensalada al carenado. Foto: MotoGP
Detrás del trío de cabeza rodaba el resto de los mortales. Unos se hundieron rápidamente (Lorenzo), otros poco a poco (Petrucci) y otros se mantuvieron (Rossi). Entre el ir y venir de pilotos que pelearon por la cuarta posición, hubo un momento en que se juntaron los tres primeros clasificados de la provisional (Dovi, Viñales y Rossi) y parecía íbamos a asistir a unas vueltas gloriosas, pero no pasó de una ilusión. Consiguieron los mejores puestos los que mantuvieron sus ritmos constantes.

Petrucci se hundió al final de la carrera. Foto: MotoGP
Notable actuación de las KTM, no tanto por la diferencia de tiempos promedio, que aunque se ha rebajado considerablemente respecto a otras carreras es más por lo pequeño de la pista, sino porque han peleado y vencido a mecánicas (Honda, Ducati y Suzuki) siempre superiores en otros GGPP. Puntuaron tanto Pol (13º) como Smith (14º). En mojado estaban mucho más cerca aún.
Lo que no hay.
Una moto netamente superior a las demás. Y que no la haya es la salsa del Mundial. Los tejemanejes de Dorna en el Mundial han funcionado. Al César lo que es del César. Y no es una tarea fácil. Elaborar un reglamento en el que todas las marcas y equipos estén contentos es una tarea compleja, porque las marcas que disponen de superioridad quieren mantenerla, y los que están en inferioridad, pues eso. El objetivo de Dorna era igualar las posibilidades tratando de evitar la escalada de costes. No sé si la segunda parte se ha cumplido, pero ahora es perfectamente posible que una moto satélite gane una carrera; de hecho son asiduas del podio. Ocurrió la temporada pasada y está ocurriendo en la actual. Un gallifante para el organizador.

Los caminos del Señor no siempre son rectos…Foto: MotoGP
En unos circuitos son mejores las Yamaha, en otros las Honda, en algunos las Ducati y a veces no está claro. Como la centralita electrónica es única para todas ellas, son las cualidades dinámicas de la moto las que marcan la diferencia. La variable neumáticos se suma a la ecuación, si bien es cierto que no de la manera deseada. Michelin es un gigante mundial, por eso no es esperable que en su segundo año en MotoGP se anden con cambios de carcasa-compuesto-diseño a mitad de temporada. Por supuesto determinadas combinaciones de neumáticos funcionarán mejor en unas motos/pistas que en otras, pero el rendimiento ha de ser uniforme en las motos que lo calcen. Los problemas de fabricación/producción no debieran serlo de los pilotos, y este año lo han sido más de una vez.

Segundas unidades en el pit lane. Foto: MotoGP
Pero el caso es que el Mundial está que arde. Los cuatro primeros están ahora en 10 puntos, y son de tres marcas diferentes. Como bien apuntaba Juan Pedro de la Torre en El Confidencial la semana pasada, “ni siquiera después del primer Gran Premio -donde Dovizioso, Viñales, Rossi y Márquez también ocuparon las cuatro primeras posiciones de la carrera- había una diferencia tan pequeña entre los cuatro primeros de la clasificación, que están separados por tan sólo once puntos.” Se puede decir que para Brno el Mundial parte de la casilla de salida para al menos cuatro pilotos -mejor no acotar- y ninguno parte con apenas ventaja.
Poco importa que sea el mundial en que el líder lleva menos puntos en total. ¿A quién le importan los récords de puntos a final de año? Arriba, en la tabla de la Clasificación General, se ha añadido la columna de ceros. Curiosamente los dos primeros -Márquez y Viñales- tienen dos ceros, mientras que Dovi y Rossi sólo uno. No han sabido aprovechar los tropiezos de los españoles, pues ambos han tenido malos días -Dovi, hoy mismo- aunque, aparte la caída, siempre han puntuado como corresponde a cualquier aspirante al título. Todos los oficiales de Honda, Yamaha y Ducati están en la pomada, salvo Lorenzo, aún desnortado; una de cal, dos de arena. Se le espera para 2018.

Tabla 1: Vueltas lideradas hasta Sachsenring. Elaboración propia
Pero es que además las carreras se deciden al final de las mismas, que es lo que nos gusta a todos. No el que más vueltas lidera figura necesariamente por delante en la Clasificación General como muestra la tabla 1. La lucha por las carreras también incluye a no oficiales (Zarco, Petrucci, Folger), algo impensable hace dos temporadas. Los pobrusos del Mundial (Aprilia, Suzuki, KTM) se asoman ocasionalmente a las posiciones delanteras, y tienen motivos y objetivos por los que seguir luchando, no como en los últimas épocas de las Honda tricilíndricas, o las KRMódenas, Kawasaki…
Cualquier tiempo pasado no fue mejor, y eso es raro de escuchar hoy en día. Nos vemos tras Brno.